La experiencia denominada Mieles producidas por abejas ubicadas en cafetales orgánicos de la Sierra Nevada de Santa Marta: producción sustentable mediante apropiación de ciencia, tecnología e innovación en el contexto colombiano, fue postulada por la organización comunitaria Asociación de Apicultores Conservacionistas de la Sierra Nevada -APISIERRA, que logró ubicarse en el lugar 25 entre las 30 experiencias con la más alta votación del concurso A Ciencia Cierta: Desarrollo local para transformar realidades, con 325 votos, que la hizo ganadora de un incentivo económico de $90.000.000 millones de pesos y el acompañamiento técnico y de apropiación social del conocimiento para el fortalecimiento de la experiencia desde la ciencia, la tecnología y la innovación.

El contenido de este video es de autoría y responsabilidad exclusiva de quienes lo protagonizan y no representa la posición de MINCIENCIAS ni de las entidades aliadas y vinculadas al Programa de A Ciencia Cierta: Desarrollo local para transformar realidades.

Lo días 9 y 10 de noviembre de 2020, se dieron cita en el municipio de San Javier, Magdalena, miembros de la Asociación de Apicultores Conservacionistas de la Sierra Nevada – APISIERRA y el equipo técnico del programa A Ciencia Cierta, con el propósito de conocer de primera mano la experiencia a reconocer como ganadora y definir el proyecto de fortalecimiento en el que se invertirá el incentivo económico a otorgar.

Como resultado de las jornadas, la organización comunitaria se propone contar en el término de diez meses, con un proceso de fortalecimiento orientado en la capacidad productiva organizativa y comercial de Apisierra para visibilizar la producción de miel de la Sierra Nevada de Santa Marta. Para ello, se definieron los siguientes objetivos:

– Fortalecer aspectos relacionados con la producción y calidad de la miel
– Mejorar aspectos de comercialización e imagen de la miel
– Innovar en otros productos
– Generar una estrategia de apropiación social del conocimiento de abejas nativas para jóvenes y adultos mayores.

El fortalecimiento de la capacidad productiva y organizativa fue clave para innovar en productos derivados de la colmena. Se instalaron dos centros de reproducción en los sitios Curval y Tigrera de Santa Marta, con un total de 100 colmenas, lo que permitió incrementar la producción apícola. Además, se innovó en la diversificación de productos, destacando la producción de propóleo, lo que amplió las opciones comerciales y mejoró la rentabilidad de los apicultores.

Un aspecto fundamental fue el rescate y traslado de abejas nativas, acompañado de la instalación de 85 meliponarios, lo que contribuyó a la preservación de especies autóctonas y al impulso de la apicultura de conservación. También se llevaron a cabo talleres de sensibilización y manejo de abejas angelita, especialmente dirigidos a niños y mujeres, promoviendo la educación sobre la importancia de las abejas en los ecosistemas y su manejo adecuado.

Para garantizar la calidad de los productos, se elaboró un manual de producción de miel, diseñado para ser una herramienta práctica para los apicultores vinculados a la propuesta de apicultura de conservación liderada por APISIERRA y ECOLSIERRA. Este manual busca asegurar que las prácticas apícolas estén alineadas con la normatividad nacional, y que la miel producida cumpla con los estándares de calidad necesarios, con miras a certificar una propuesta de denominación de origen para las mieles de la Sierra Nevada de Santa Marta. Este conjunto de acciones ha fortalecido la capacidad de los apicultores y promovido la conservación de las abejas nativa contribuyendo al desarrollo sostenible de la región.